Principeso es un dragón grande y tierno, hijo de las reinas Troncha y Concha que viven en un país donde todo tiene un aroma bastante espeso, menos Principeso, que tiene un aroma de los más fresco y eso le hace tan irresistible que el resto de animales se abalanzan a su paso… A lo largo de sus cinco años de vida ha recibido besos de todo tipo: Besos de vaca que le mojan la cara; besos de mariposa que le hacen cosquillas en las mejillas; besos de esquimal que le dejan desgastado y sin fuego que lanzar… ha recibido tantos besos que en el reino le llaman Principeso cara de beso. No creáis que esto le hace feliz, más bien le hace sentirse extraño, y de su cueva ya no quiere salir. ¿Quieres descubrir qué es eso que le hace tan irresistible? ¿Por qué Principeso tiene cara de beso?… Disfruta con este precioso cuento y sus ilustraciones, de una historia tan grande y tierna como su protagonista. Una historia divertida y comprometida con el empoderamiento infantil y la educación emocional. Una historia necesaria para enseñar a los peques a poner límites sobre su cuerpo, y aprender a decidir sobre sus besos; a decir que no, pero con toques de humor. Un cuento que te hará disfrutar, emocionarte y aprender algo tan necesario como básico: “Yo decido mis besos, porque mi cuerpo es mío”. Una herramienta básica para prevenir el abuso infantil y el abuso entre iguales. Texto: Pilar Romero. Ilustraciones: Noelia Montesinos. Editorial: Infancia Empoderada.
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