Cómo usar el cinturón de seguridad si estás embarazada

El embarazo no debe limitar la realización de actividades rutinarias como, por ejemplo, conducir un vehículo. Pero, sí es aconsejable que si estás embarazada conozcas cómo utilizar correctamente el cinturón de seguridad para poder conducir cómoda y segura. El embarazo te cambia el cuerpo y altera tu comodidad en el automóvil. Por ello, debes adaptarte al vehículo durante los periodos de gestación sin anteponer tu comodidad a la seguridad en el vehículo, ya que ambas se deben complementar.

Ante todo, te en cuenta que en España el uso del cinturón de seguridad es obligatorio para todas las personas adultas ocupantes de un vehículo incluidas las mujeres embarazadas. En caso de no usarlo correctamente según el Reglamento General de Circulación te expones a una infracción grave de tres puntos en el carnet, multa de 200€ y riesgo de lesiones o pérdida del feto en caso de accidente.

Según las estadísticas entre 200 y 700 embarazadas pierden el feto al año por no llevar el cinturón correctamente abrochado. Si utilizas el cinturón de seguridad en un vehículo, reduces el riesgo de muerte del feto hasta en un 80% ya que es un elemento crucial de seguridad vial. Según un estudio realizado en Estados Unidos, las mujeres embarazadas que habían sufrido un accidente tienen el doble de probabilidades de tener un bebé bajo de peso y 2,3 veces más riesgo de dar a luz en las 48 horas posteriores al accidente. Otra investigación indica que la mortalidad del feto en los accidentes en carretera es tres veces superior a la de la madre.

Por lo que si estás embarazada y conduces es primordial que conozcas el uso adecuado y correcto del cinturón de seguridad cuando estés al volante porque ante cualquier frenazo, aunque sea a baja velocidad, tu cuerpo se desplaza hacia delante. Por tu seguridad y la de tu bebé ten en cuenta algunas recomendaciones y consejos de la DGT (Dirección General de Tráfico) para abrocharte el cinturón correctamente:

1. El cinturón nunca debe quedar holgado. Adáptalo a tus estados de gestación. Siempre debe generar una presión como precaución ante cualquier accidente. No se aconseja acoplar ningún tipo de accesorio como cojín o almohada sobre el asiento ni pinza en el cinturón. Si las bandas van holgadas porque colocas algún objeto intermedio como un cojín, anulas por completo la eficacia del cinturón.
2. La banda horizontal o inferior del cinturón de seguridad debe quedar siempre por debajo del abdomen y debe ajustarse correctamente a los huesos de la cadera. No debe subir hasta el vientre ni ejercer presión sobre el útero porque podría dañar el feto e incluso provocar un aborto. Para ajustarlo bien levanta el vientre y coloca el cinturón siempre por debajo del abdomen, entre la parte superior de los muslos y los huesos de la cadera. En invierno quítate ropa de abrigo para evitar que el cinturón se deslice hacia la parte superior de tu vientre. No debes prescindir de esta banda horizontal porque podrías sufrir el efecto submarino ante un accidente o una fuerte frenada, es decir, tu cuerpo sería empujado a parte inferior del vehículo y no te serviría de nada haber llevado el cinturón con la banda diagonal.
3. La banda diagonal del cinturón de seguridad tiene que quedar ajustada sobre el hombro y el esternón. Debe cruzar los senos sin llegar a apoyarse en ninguno de ellos. No debe rozar el cuello, ni quedar por encima del pecho, ni pasar por debajo del brazo ya que presionaría las costillas y te podría ocasionar lesiones internas en el hígado y bazo ante un accidente.
4. Regula tu asiento y el volante. Según avance tu embarazo aumenta la distancia al volante manteniendo siempre el asiento en posición vertical. Cuanto más reclines el asiento mayor será la distancia entre tu hombro y el cinturón de seguridad y mayor la presión sobre tu útero. Se recomienda mantener una distancia mínima de 20 cm de separación entre tu vientre y el volante. Si no puedes mantener esa distancia mínima, lo recomendable es evitar conducir. En caso de choque esta distancia mínima protege tu vientre del airbag. Si estás demasiado cerca del airbag, éste puede ser peligroso cuando se abra. En caso de que no conduzcas y viajes como copiloto o acompañante regula la distancia de tu asiento al salpicadero e intenta sentarte en el asiento central trasero. Es el lugar más seguro del vehículo.
5. Nunca desconectes el airbag del asiento delantero. Debes utilizar siempre el cinturón de seguridad junto con el airbag para mayor eficacia.

Usar el cinturón de seguridad en el embarazo correctamente ajustado en la parte del regazo y en el hombro significa que tu bebé tiene 4,5 veces más probabilidades de sobrevivir e incluso de crecer sano ante un posible impacto.

¿Puedo conducir durante todo mi embarazo?

Es posible conducir durante prácticamente todo el embarazo, a no ser que el médico te recomiende lo contrario. Recuerda que no sólo es obligatorio usar el cinturón de seguridad de forma correcta en todo momento, sino que es necesario porque es la mejor manera de protegerte a ti y a tu bebé. Debes de tener en cuenta que ante un posible accidente existen riesgos graves que pueden dañarte a ti como madre y a tu futuro bebé.

Durante los primeros tres meses de embarazo el bebé está menos protegido en el abdomen de la madre debido a la escasa cantidad de líquido amniótico. Un posible impacto o accidente en esta fase puede provocar un desprendimiento de la placenta que te haga sufrir hemorragias en el útero y limite la llegada de oxígeno al feto.

En los últimos tres meses de embarazo o a partir del séptimo mes el tamaño del bebé y de tu abdomen ya es mayor. Por lo que, puede que te sientas más incómoda al volante a partir de estos meses de embarazo. Si sigues conduciendo debes circular con precaución y seguir usando el cinturón de seguridad. En esta fase, una frenada o accidente de tráfico puede producir traumatismos en el cráneo del bebé al impactar con tu pelvis y podría provocar un adelantamiento de la fecha del parto.

Por seguridad también se recomienda viajar acompañada a partir de la semana treinta de embarazo. Si además sufres alguna alteración en tu cuerpo o trastorno relacionado con tu estado como piernas hinchadas, agudeza visual, altos niveles de azúcar o náuseas, intenta reducir tu tiempo al volante, ya que dichos cambios pueden influir en tu capacidad de conducción. Es necesario descansar a menudo y conducir de manera relajada sin tener que frenar bruscamente.

En viajes largos, recuerda aumentar el número de paradas para caminar y activar tu circulación. Es recomendable realizar al menos una parada cada hora. Ante cualquier duda sobre si debes o no seguir desplazándote en coche acude a tu ginecólogo o matrona para que te oriente.

Cómo viajar cómoda y segura al conducir embarazada

El cinturón de seguridad de los vehículos ha sido elaborado para un ocupante de 170 cm de altura y 75 kg de peso. Es un arnés creado para sostenernos en caso de accidente y bajo unas características que a veces no se adaptan al cuerpo de una mujer embarazada que durante 9 meses cambia continuamente.

La tendencia según aumente el vientre durante el embarazo es que el cinturón de seguridad se desplace hacia el abdomen. Para evitarlo en 2005 se comenzaron a comercializar los cinturones de seguridad para embarazadas que mantienen la banda horizontal por debajo del abdomen sin que disminuya su efectividad. Aportan una mayor comodidad y evitan posibles molestias que el cinturón común puede provocar durante el embarazo. Un elemento de seguridad que se puede usar desde el segundo mes de embarazo y que evita lesiones internas en caso de frenazo o colisión. De acuerdo a algunos estudios, la madre se encuentra tres veces más segura cuando usa el cinturón de seguridad para embarazadas y las probabilidades de que el bebé muera se reducen considerablemente.

Los cinturones de seguridad para embarazadas no requieren una homologación como pueden necesitar las sillas para bebés y niños, pero es aconsejable que cuenten con la certificación europea ECE R-16 o ECE R-14. Existen diversos modelos, pero los más cómodos son los que cuentan con doble fijación a ambos lados ya que se adaptan a todo tipo de asientos. Los dobles enganches permiten que los puedas usar tanto con pantalones como con faldas. También se consideran los más seguros porque reducen en más del 50% los riesgos que podría sufrir el feto.

Al nacer tu bebé consulta a tu médico cuándo puedes volver a conducir. Se recomienda esperar 3 meses si has tenido un parto sin complicaciones o 6 semanas en caso de un parto por cesárea. En el viaje de vuelta del hospital a casa debes colocar a tu bebé en una silla infantil homologada hasta que alcance la altura de 1,36 metros.

Si sigues teniendo dudas sobre cómo utilizar el cinturón de seguridad durante el embarazo, puedes preguntarnos y te asesoramos personalmente sobre la seguridad vial durante la gestación y después del nacimiento de tu bebé.